La erosión costera en Chile podría eliminar 10 playas en una década, advierten científicos
"Estamos viendo acantilados y costas arenosas retrocediendo rápidamente"
Con información de Reuters
RENACA, Chile, 30 de julio (Reuters) - Las costas centrales y sureñas de Chile enfrentan una erosión que podría hacer desaparecer al menos 10 playas en el transcurso de una década, según un equipo de científicos en este país sudamericano, que se extiende por varios miles de kilómetros a lo largo del Océano Pacífico.
"Será muy difícil que estas playas sobrevivan los próximos 10 años", dijo Carolina Martínez, directora del Observatorio Costero de la Universidad Católica, en una entrevista este mes en la playa de Reñaca, cerca de la popular ciudad costera de Viña del Mar.
Su equipo ha monitoreado la erosión en 67 playas, encontrando que el 86% se está reduciendo de manera constante, incluso durante la primavera y el verano, cuando típicamente se recuperan.
Diez playas en particular, que ya presentaban una alta erosión en 2023, han continuado perdiendo terreno rápidamente, con tasas ahora aproximadamente el doble de altas.
Las causas son tanto naturales como provocadas por el ser humano, explicó Martínez.
Señaló como factores clave las olas intensas y cada vez más frecuentes impulsadas por el cambio climático, junto con el aumento del nivel del mar, lluvias repentinas y olas de calor. La urbanización descontrolada y la degradación de las cuencas fluviales que suministran arena a la costa también han contribuido.
En Puerto Saavedra, en la región sureña de Araucanía, las marejadas han excavado socavones en carreteras y acantilados, cortando el acceso a algunas comunidades. El agua salada también está dañando los bosques.
"Estamos viendo acantilados y costas arenosas retrocediendo rápidamente", dijo Martínez.
Algunos negocios locales en ciudades turísticas populares ya están sintiendo el impacto. "El año pasado fue brutal... la playa desapareció", dijo María Harris, propietaria de un restaurante frente al mar en Valparaíso. "No había espacio entre nosotros y el mar."
A pesar de los riesgos, la construcción continúa a lo largo de la costa, a menudo cerca de humedales y dunas. Martínez advirtió que los impactos van más allá del medio ambiente.
"Estamos transfiriendo el costo de estos desastres a las personas: pescadores, comunidades costeras y el sector turístico", afirmó.