AN con mayoría simple designó magistrados del TSJ
Foto: archivo
Por mayoría simple y contrario a lo establecido en la Constitución la Asamblea Nacional designó a los nuevos magistrados al Tribunal Supremo de Justicia
Caracas. Evely Orta
El diputado Elvis Amoroso, indicó que la bancada oficialista está cumpliendo con la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela para designar a los magistrados del TSJ, claro esta interpretada como ya es habitual a conveniencia del sector oficialista.
Amoroso en un discurso bochornoso afirmó: “Aquí tenemos los votos de la revolución y del pueblo para designar a los magistrados y magistradas del TSJ”.
Por su parte, la diputada de la Unidad Deyalitza Aray, ratificó el voto salvado ante la secretaria de esta Asamblea, así como aseguró que tampoco se declinará “a la exigencia ciudadana de recuperar la constitucionalidad del país”.
“No podemos avalar esta absurda renovación de los poderes públicos”, agregó la parlamentaria.
Aray indicó que se debe hacer una “verdadera renovación de los poderes públicos, para que así se pueda garantizar el mandato constitucional.
Pedro Carreño, señaló que la Constitución establece que la Asamblea Nacional debe designar los cargos públicos y que la oposición se ha negado a respetar la norma.
“No votar es incumplir con el mandato”, dijo al referirse a la oposición fueron electos para cumplir con sus competencias.
En este sentido, el presidente a la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, mencionó que los opositores “nunca van a votar” por son unos “flojos”, debido a que al menos la mitad de los legisladores que asistieron se retiraron del hemiciclo. De esta manera, aplaudió la asistencia de los 99 diputados de la bancada chavista.
“Aquí vamos a defender lo que tengamos de defender (…) Si van a elecciones como establece la Constitución, los vamos a ganar y lo vamos a enfrentar tal cual como ustedes actúen”, dijo.
La bancada oficialista centro su ataque a la unidad ante la negativa de la oposición de negociar para aprobar las elecciones de los poderes públicos, CNE y de los magistrados del TSJ, lo que daría ante la opinión pública credibilidad hoy muy cuestionados por la sociedad civil venezolana.