Duro golpe a Maduro; Por Omar González Moreno / @omargonzalez6
Mar de Fondo
El anuncio del presidente de EEUU, Donald Trump, sobre la imposición de un arancel del 25% a los países que comercialicen petróleo o gas venezolano tiene el potencial de generar graves consecuencias para la dictadura de Nicolás Maduro.
Esta medida busca ejercer la mayor presión económica posible sobre el régimen tiránico de Nicolás Maduro, ya debilitado por la falta de apoyo popular, la corrupción, el narcotráfico, las sistemáticas violaciones a los derechos humanos, las sanciones personales y la crisis interna.
En primer lugar, el arancel va a disuadir a países y empresas de continuar sus relaciones comerciales con la Venezuela de Maduro, particularmente en el sector energético.
Dado que la industria petrolera es la principal fuente de ingresos del régimen, un descenso en las exportaciones acentuará la crisis económica y reducirá aún más los fondos disponibles, debilitando su capacidad para sostenerse en el poder, mediante la corrupción de los altos mandos militares y policiales, asi como de los dirigentes que se hacen pasar por opositores, pero que en la práctica actúan como agentes encubiertos de la dictadura.
Además, esta medida profundizará el aislamiento internacional de Maduro.
Al crear un costo adicional para los países que busquen importar petróleo venezolano, Trump busca alinear a otros gobiernos en su campaña contra este régimen, promoviendo un mayor consenso global en torno a la necesidad de una transición democrática en Venezuela.
Por otro lado, la dictadura de Maduro podría intentar buscar aliados alternativos que estén dispuestos a ignorar el arancel, pero estos esfuerzos podrían resultar complicados y muy limitados, si es que consigue alguno.
La dependencia de Venezuela del mercado energético, junto con las crisis humanitaria y política interna, deja al régimen en una posición sumamente frágil y difícil de superar.
En resumen, la medida anunciada por Trump representa una estrategia para intensificar la presión sobre el régimen de Maduro, con el objetivo de desestabilizar sus fuentes de financiamiento y fomentar un cambio político en el país, lo más pronto posible.
Las consecuencias de esta política pueden acelerar el fin de la dictadura, aunque también podrían intensificar la lucha por la supervivencia del régimen, mediante un incremento suicida de la represión, ante un contexto económico fatalmente adverso.
La mayoria de los analistas coinciden que la dictadura de Nicolás Maduro está frente a la más comprometida situación de su historia.
