Guanta: 2020 ¿Mientras tanto, qué..?; por: José Angel Borrego
La presidenta municipal de la Cámara de Guanta tiene deseos de trabajar por su pueblo. Ser productiva a una escala que aún no se conoce en el país. Podríamos asombrarnos porque Guanta es un municipio pequeño aunque privilegiadamente ubicado en un rincón del Parque Nacional Mochima con las más bellas playas de la región hasta sus límites con el también playero estado Sucre. Ella, la presidenta, Yamileth Alfonzo, piensa en grande a diferencia del alcalde quien sencillamente parece que ni siquiera piensa.
El país está en un “mientras tanto” por la discordia reinante entre gobierno y oposición porque a diferencia de las naciones desarrolladas, el contexto político lo abarca todo en países como el nuestro y no se mueve una paja mientras haya conflictos. Aunque debemos reconocer que en Chile, Colombia, Brasil y otros, ante escenarios caóticos el PIB se contrae un poco pero la economía productiva no se paraliza. La contracción obedece a etapas temporales del clima político pero sin incidencias graves en la productividad porque se respetan: la empresa privada, la propiedad privada y la iniciativa privada y el gobierno acepta excluir a estos factores de conflictividades lacerantes porque se suicida ante el electorado en las citas periódicas creíbles y respetadas por el globo que existen en naciones democráticas. No como las payasadas nuestras con un CNE que aprendió con Smarmatic, sin proponérselo ésta, a chimbear los equipos computarizados.
Nos salimos del tema. Hablábamos de la presidenta municipal de Guanta porque ella ha decidido sacar del juego político maléfico a su pequeña ciudad con el fin de enrumbarla por derroteros apegados a lo que se supone debe hacer una Autoridad Municipal. De tal forma que la presidenta Yamileth Alfonzo ha rescatado algunas propuestas de gente que piensa en el país y con mucho entusiasmo y compromiso pretende dejar una huella visible de su paso por la Cámara Municipal con el mejor argumento: trabajando.
No es nuestro propósito “fusilar” el anuncio de la presidenta y por ende lo dejamos de este tamaño. Lo tomamos como una muestra de lo que puede hacerse mientras el país político se conflictúa sin tomar previsiones que blinden la productividad. Es posible emerger del caos si se cuenta con marco legal y la inteligencia necesaria para impulsar ideas que surgen de la llamada sociedad civil. Eso hace la presidenta Alfonzo.
Desde esta modesta tribuna hemos abogado por decisiones similares, una de ellas dirigida a Nueva Esparta, porque conocemos la realidad de ese estado y su peligroso nivel de vulnerabilidad ante la crisis que asfixia al país. Hasta ahora hemos predicado en un desierto que abanderan el alto gobierno y la alta dirigencia chavista nacional, regional y local. No hay forma de acceder al presidente. No existe viaducto alguno que conduzca a un funcionario con potestades productivas. No se dispone de auditorios que escuchen a la inteligencia venezolana. Algo debería poder hacerse en el mientras tanto.
