Buniak considera que el aumento de salario incrementó cinco veces la liquidez monetaria
El jefe del estado fijó en 4.500 el salario mínimo nacional, una alza del 150% con relación a los 1800 bolívares soberanos establecidos para el 1 de septiembre
Con información de El Universal
El economista y experto financiero, Leonardo Buniak, considera que tras el nuevo aumento del salario mínimo se quintuplicó la liquidez monetaria en el país lo cual a su juicio significa es “mucho combustible para la inflación”.
El presidente Nicolás Maduro decretó el pasado viernes un aumento en el salario mínimo, el segundo en tres meses, luego de las medidas económicas del 20 de agosto que suprimió cinco ceros al antiguo cono monetario.
El jefe del estado fijó en 4.500 el salario mínimo nacional, un incremento del 150% con relación a los 1800 bolívares soberanos establecidos para el 1 de septiembre.
Buniak considera que este incremento multiplica cinco veces la liquidez monetaria, que a la fecha se ubica en 317 mil millones de Bolívares Soberanos, con miras a seguir aumentando durante el mes de diciembre.
“Si se mantiene el comportamiento que ha registrado desde hace meses, la liquidez va a llegar a un billón 118 mil millones de bolívares soberanos. Eso es combustible para la inflación”, expresó.
Precisó que la liquidez monetaria en el país pasó en el mes de agosto de 66 mil millones de bolívares soberanos a 317 mil millones de bolívares soberanos, en solo tres meses.
Explicó que la liquidez monetaria significa mucho dinero en la calle el cual es utilizado para que las personas y las familias puedan comprar productos y servicios “que ni siquiera se han producido”.
Observó que el jefe de Estado había reconocido en cadena nacional que debía haber una política de déficit fiscal cero y, además, admitió que estaban emitiendo dinero inorgánico a través del Banco Central de Venezuela (BCV).
“Este nuevo aumento salarial impacta directamente en todas las estructuras de bonos, en el pago de los pensionados y todos los programas o misiones sociales del Estado, y para financiar todo este gasto público, el BCV inyectará dinero sin respaldo”.
Comentó que la inflación que se esperaba para este año, de 4 millones 200 mil por ciento “se quedó corta”.
“Las expectativas hiperinflacionarias para 2019 son tremendas, de aproximadamente 10 millones por ciento y de continuar este proceso de financiamiento inorgánico, de monetización del déficit fiscal las expectativas son de varios de miles de millones %”.
“Enero arranca con expectativas de colapso macroeconómico”, alertó.