El Gobierno venezolano no convence… Aumentan las solicitudes de dialogo
Caracas. Evely Orta
A pesar de sus reiteradas declaraciones la Fiscal General de la República, Luisa Ortega Díaz, según las cuales en Venezuela no hay presos políticos y que se han garantizados los DDHH a los detenidos, los organismos internacionales continúan denunciando la gravedad de la situación sobre esta materia en el país.
Tal es el caso de Amnistía Internacional, que en su informe, alertó al Comité contra la Tortura sobre los efectos de la decisión del Gobierno de retirar al país de la jurisdicción de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
"La Corte era el último recurso y esperanza de justicia para cientos de víctimas de violaciones a los Derechos Humanos", se lee en el documento, en el cual se agrega que "ya no estará disponible para los venezolanos".
Por su parte, el Foro por la Vida, que agrupa a más de una docena de organizaciones de Derechos Humanos, en su reporte expresó su preocupación porque en los informes anuales del Ministerio Público de 2012 y 2013 la palabra tortura no aparece.
Igualmente denunció que en esos documentos no se precisa cuántos casos de tortura fueron denunciados, cuántas personas resultaron afectadas y cuántos funcionarios fueron procesados por estos.
Entre tanto, las reacciones internacionales no se han hecho esperar desde el Vaticano, la Casa Blanca, la OEA y la región, coincidieron en que el gobierno de Venezuela debe liberar a figuras de la oposición como Leopoldo López.
Al gobierno revolucionario se le suman a diario más críticas por haber encarcelado al dirigente Leopoldo López, a los ex alcaldes Daniel Ceballos y Enzo Scarano, a centenares de estudiantes y manifestantes que participaron de las protestas iniciadas en febrero.
Tan solo la semana pasada en la ONU, el presidente estadounidense Barack Obama, pidió por la liberación de López, esta solicitud se une a las realizadas por el papa Francisco y el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, y las cuales coinciden en la necesidad de establecer el diálogo y reconciliación entre el Gobierno y la oposición.
Este sábado el presidente de Perú, Ollanta Humala, también se sumó al pedido al expresar su preocupación por la crisis política que atraviesa Venezuela y destacó el derecho de los ciudadanos de protestar.