Inhabilitación: El Gran Error; por Pancho Aguilarte / @p_aguilarte

Lunes 3 de julio de 2003

Divagaciones

El régimen ha cometido el más grave y último error, que puede arrastrarlos hacia el final.Utilizar a la Contraloria para eliminar la más seria amenaza significa que se quedaron sin argumentos, solo dependiendo de esa jugada con las cartas boca arriba y una pistola apuntando a la cabeza del contrincante, buscando que este no muestre sus cartas y acepte que el otro jugador acepte.

Solo que esta vez los jugadores tienen a su alrededor un público numeroso que ha visto las cartas de ambos y condenan la manera abusiva, cobarde e ilegal con que el régimen quiere apartar al adversario más fuerte.

Un error porque todo aquello que había logrado el régimen con el reconocimiento de países que antes lo habían condenado, lo han echado por la borda, y recibirán más sanciones y por más naciones e instituciones.

Y es que las inhabilitaciones surgieron como una manera de castigar la corrupción pero el régimen la utiliza como una guillotina política para deshacerse de sus rivales sin contarse en las urnas electorales.

Pero esta vez la candidata ha desestimado y ha dicho en un reto que presagia la estrategia definitiva para salir del régimen que llegará hasta el final ( ???) lo que le significado más y más apoyos dmtanto fuera como dentro, haciendo quedar muy mal al régimen. Que pasará? Llegarán hasta el final con esa medida o rectificarán ? Los días por venir serán claves , mientras la lucha interna entre las tendencias internas continúan, también los ciudadanos se preparan para acompañar a su candidata hasta el final, un final que se nos insinúa como aquella frase del Maestro Rómulo Gallegos : Las cosas vuelven al lugar de donde salieron.

Ni cuando Chávez, que dió un golpe de estado se utilizó la inhabilitación como arma política

Ahora María Corina está más fuerte que nunca, todos sabemos que ella tiene la primera opción con una ventaja asombrosa cercana al 60% y Venezuela está cada vez más cerca de volver a ser lo que éramos hace más de veinte años. Viva María Corina, valiente mujer