Yo habilito a María Corina; por Daniel Pinto
Yo habilito a María Corina, suena como un slogan electoral, pero de trasfondo puede existir una afirmación más profunda. Más allá de solidarizarnos con nuestra voz y opinión, podemos adquirir el compromiso de colaboración.
Arnold Swatzenegger en un discurso académico rodado por medios digitales rezaba en su tesis “nadie alcanza el éxito solo”, y el rasgo fundamental de la raza humana es su capacidad de asociarse y de cooperar. Un megaterio no es cazado con una sola lanza. Así que varios de mis coterráneos que se han sentado a opinar “esa inhabilitación se veía venir, veamos que va a hacer ahora María Corina”. Hago la invitación a reflexionar. ¿qué haremos nosotros? ¿Qué podemos hacer? La líder ha manifestado su compromiso de continuar y ser consecuente con su discurso de varios años de construir fuerza. Habilito a María Corina es un compromiso de formar parte de esa fuerza, con mi ayuda puedan pasar cosas que nos acerquen a la liberación de Venezuela. Le genero habilidad a una persona que ha tenido que navegar de la mejor manera ética posible la vida partidista en Venezuela. Así sea poco lo que puedo dar, pero voy a dar, como un ejercicio ciudadano.
Una vez el actor de voz Frank Carreño cerrando un curso de doblaje, le fue preguntado la manera de alcanzar el éxito: Pidió que se escribiera en una hoja de papel, por un lado nuestros sueños y metas y por el otro lado nuestra rutina de vida. Si en nuestra rutina hay alguna o varias actividades que lleven a nuestras metas, estaríamos persiguiendo el éxito. Si nuestra meta común es salir del chavismo, ¿Que actividad podemos incorporar en nuestra vida para cooperar con nuestros vecinos que también tienen ese anhelo? Invito a reunirse con los suyos, a armar peña, como dicen los ibéricos, organizarse. María Corina solo se detiene si Venezuela se detiene.