Venezuela tiene músculo para cambiar al sistema; por Pedro Galvis / @pgalvisve
Después de contrastar las imágenes de las multitudinaria manifestaciones que se realizaron en casi todos los estados de Venezuela, pudimos apreciar a un ciudadano molesto pero activo reclamando por sus derechos individuales y los colectivos.
En la marcha de Anzoátegui marchamos educadores, médicos, enfermeras, sociedad civil agrupadas en distintas organizaciones no gubernamentales, dirigentes de diferentes partidos políticos. Ciudadanos todos.
Durante esas manifestaciones multitudinarias pudimos apreciar que el país no está dormido, que Venezuela se levanta y que la unidad es posible sólo cuando se comparten objetivos comunes, y si dichos objetivos tienen propósitos nobles, entonces esa unidad le es útil a las necesidades y aspiraciones de los venezolanos.
Hay quienes piensan que las marchas de los trabajadores son egoístas, porque sólo reclaman sus derechos y reivindicaciones laborales, y asumen que una vez consigan esos aumentos se replegarán por qué lograron sus objetivos. Nada más alejado de la verdad, lo que están haciendo los trabajadores de sindicatos, gremios profesionales y técnicos es la defensa de los derechos de todos los venezolanos, porque al fin y al cabo trabajadores somos todos, y todos estamos pasando trabajo, como consecuencia de las políticas socialistas implementadas por el mandamás de turno. Así como el derecho al trabajo está garantizado en la Constitución, también lo está el derecho a recibir una contraprestación monetaria suficiente para mantener al trabajador y le permita atender las necesidades de su familia. De manera que, no es un ejercicio de egoísmo de parte de los trabajadores, sino un acto de rebeldía y reclamo, para exigir el cumplimiento de sus derechos.
Maduro, sus mafias y sus aliados, han derogado de hecho los derechos de todos los venezolanos, consagrados en la Constitución, por lo tanto, todos tenemos razones para protestar. Este 2023 empieza con una gran agitación en las calles de Venezuela que no puede ser contenida por los cuerpos de seguridad, y genera terror en la cúpula que usurpa el poder. Esta semana vimos a decenas de miles de venezolanos protestando por todo el país, pero esas manifestaciones es insuficiente, sí tú no te levantas y reclamas tus derechos también.
El trabajo para restablecer nuestra libertad y democracia, es muy complejo, está lleno de obstáculos, quizás el mayor de ellos es el estado de negación nihilista en la cual ha caído una parte del país, ciudadanos que se sienten engañados, estafados por las ofertas políticas de los demagogos y populistas que han colmado la escena pública del país hasta ahora, y por ello desconfían de esos políticos, pero meten a todos en un mismo saco.
Esa generalización es muy injusta, porque si algo he visto durante estos largos 23 años, en campaña para recuperar nuestra libertad y democracia, es qué hay muchos ciudadanos que se caen y se levantan para seguir trabajando para conseguir aquello que se ha convertido en la aspiración generalizada de los venezolanos. A ellos, mi reconocimiento y tributo porque el problema no es caer si no rendirse, son dirigentes populares de muchos partidos, regados por todo el país, a quienes sus dirigentes nacionales los ha conducido de abismo en abismo, sin embargo, esos ciudadanos también son tus vecinos, son líderes sociales que a pesar de la adversidad, hacen muchos sacrificios para tratar de cumplir un objetivo que sólo se logra una vez.
Enfrentarse a una tiranía como la que hoy tenemos en Venezuela, es enfrentarse a la posibilidad de ser derrotados en muchas oportunidades, eso es parte del oficio, pero el premio a la constancia y el trabajo es la victoria; el triunfo de la verdad sobre la mentira, de la libertad sobre la tiranía, eso se logra una sola vez, después de haber sufrido varias derrotas, hasta que cuando los eventos se alinean, llega la libertad. luego tendremos que trabajar mucho para defender lo conquistado.
Este 23 de enero de 2023, se cumplieron 65 años desde que fue derrotado el dictador Marcos Pérez Jiménez. Ciudadanos que aspiraban libertad salieron a conquistarla. Este año 2023 nos corresponde a todos los venezolanos de bien levantar nuestras voces salir a las calles reclamar nuestros derechos, para estimular a otros hasta que caiga la tiranía. Aquí todos somos necesarios, mientras entendamos que la unidad sólo es posible entre quienes compartimos objetivos comunes, ajustados a las aspiraciones de los venezolanos que exigimos libertad. Para poner orden en Venezuela con un sistema de justicia libre e independiente, con un sistema de libertades económicas abiertas para generar oportunidades de trabajo y bienestar que nos permita a los venezolanos tener dinero en los bolsillos, para vivir con dignidad, y que esa prosperidad y estabilidad que se desprenda de la libertad permita a nuestras familias regadas por el mundo a regresar a nuestra amada Venezuela.
En nuestro país es imperativo lograr un cambio y transformación profunda, es necesario sustituir el sistema político que se ha insertado en el pensamiento venezolano desde hace mucho tiempo. Necesitamos una política renovada, con liderazgo dispuesto a implementar esta transformación profunda que necesitamos para progresar y vivir en paz. Por esa razón cada venezolano debe levantar su voz para exigir que se realicen las primarias, abiertas a la participación de todos los venezolanos indistintamente de donde están viviendo, que el voto sea manual y sin interferencias del régimen, ni excusas seudolegales, pues este es un proceso de los ciudadanos que aspiramos un cambio en la conducción de la política nacional.
Y como decía nuestro libertador Simón Bolívar, aquellos que luchan por la libertad y por la gloria no pueden recibir otro premio que la gloria y la libertad.