La advertencia de María Corina; por: José Angel Borrego
María Corina Machado advierte que “no estamos enfrentando una dictadura más, esto es un régimen criminal”. Y agrega que el gobierno juega con la oposición proponiendo ciclos de diálogo infructíferos que solo le permiten ganar tiempo para cometer atrocidades. Cierto y lo sabe cualquier cristiano. El punto es que el gobierno propone pero la oposición no está obligada a aceptar. La repetición sistemática del mismo jueguito tiene un proponente pero también un aceptante. La excusa es que la oposición no quiere ser la piedra de tranca y aparecer como reacio a la búsqueda de soluciones. Pero la respuesta es sencilla. En vez de mudarse a lugares tan remotos y tan alejados de la gente para presumiblemente dialogar, la oposición puede contraofertar las locaciones externas por la “opción Caracas” en cadena nacional de radio y TV como ya se hizo una vez, pero con un director de debates honorable. El embajador de Estocolmo, por ejemplo, o cualquier otro de otra nación extranjera que ofrezca sus buenos oficios. Que se implemente un diálogo condicionado a que las partes deban acordar algo de cada punto. Que los facilitadores internacionales supediten estos ejercicios a la toma de decisiones. Nada de puro bla-blá. Yde esa forma el país no tendría que calarse la perorata de “perro-cobero” (Jorge Rodríguez) mintiendo con su sonrisita sospechosa. El país sabría quién miente. El país conocería de forma directa quién escurre el bulto. Y como el gobierno cierra sistemáticamente los micrófonos a la oposición,que estas pautas las proponga el embajador. Basta de mamadera de gallo del gobierno y la oposición hacia el país. Merecemos un mínimo de seriedad y eso lo registran las últimas encuestas. Los dos liderazgos (Maduro y Guaidó) suman 60 % porque 40 % de la gente pensante reprueba la actitud de ambos. Guaidó se inició con más de 80 % de afectos y ahora registra 35/37 % mientras Maduro que rozaba el 10 % ascendió a 23/25 % según informan Datanalisis y Datincorp.
Hable con María Corina, señor Guaidó. Métala en la jugada. No sea terco..!