Maestro, nada que celebrar, solo recordar y volver luchar; por: Pancho Aguilarte / @P_Aguilarte
Hoy es un día que se estableció para enaltecer la humilde profesión de “Maestro” la peor pagada en Venezuela y en la mayor parte del mundo, con excepción de Finlandia, Noruega, Japón y Dinamarca. En Venezuela el salario del docente se fue deteriorando con la misma prisa con que se fue deteriorando la sociedad, sus valores y principios.Muchos de los que escogimos esa profesión lo hicimos por vocación, inclinados por la felicidad que produce el poder enseñar a otros pero nunca porque esperáramos que ella nos llevaría a resolver nuestros problemas económicos. De esa experiencia existencial quedan solo los recuerdos de tiempos mejores porque de un tiempo para acá hasta los alumnos se olvidan de sus “Maestros y Profesores”.
Antes y hasta finales de los años 60 los estudiantes recordábamos a quienes fueron muy importantes en nuestra formación primaria, secundaria y universitaria. Personalmente no puedo olvidar a mis maestros Beatriz Ramos (1 grado), Viterma ( 2 grado), Teresa Palazzi ( 3 grado), Trinidad Arredondo ( 4 grado), Alejandro Vasquez ( 5 grado), y mi tía Maria Angelica Torres Chacin ( 6 grado). Igual recuerdo a mis profesores del bachillerato pero nombraré algunos para no hacer tan tedioso el tema; Plutarco Rodriguez, Jose Luis Salazar, Josefina Valencia de Damas, Ligia Avila, Mario Arroyo, Luis Cabeza, Carlos Lucero, José Santaella, Adolfo Martinez, Noel Hernandez, Julio Delpino, Jesus Meza. Todos ellos de importancia fundamental en mi preparación e inspiración docente.
Hoy todo es distinto, el maestro ya no es el modelo de otrora, hoy es un ejemplo pero de resistencia, es el mejor ejemplo para valorar el sitial de la educación del país.Ya no le queda tiempo sino para subsistir y compartir con sus alumnos la tristeza y las carencias de una sociedad que decidió escoger el peor de los caminos.Hoy no abra fiestas, ni condecoraciones, ni reconocimiento y el salario sigue hundiéndose hasta hacer mas miserable a la mas hermosa de las profesiones y la mas sacrificada de todas.Hoy como docente que fui durante años y en todos los niveles, hasta en el INCE, hoy no quiero celebrar, hoy quiero recordar, quiero viajar a aquellos años en que de la mano de mis maestros aprendi de la geografía nacional, sus mares y montañas, rios y sabanas.
Hoy quiero creer que aquella valentía y coraje que narra nuestra historia de Venezuela espera el momento de “regresar a Carabobo” hoy mis recuerdos viajan al tono del pájaro guarandor, Al árbol debemos, al amarillo Araguaney, esperando entonar con fuerza libertaria el Gloria al Bravo Pueblo para siempre.
Hoy los maestros son parte fundamental del nuevo país que deseamos y ese es el objetivo a celebrar