¡Ahora sí!; por: Antonio Barreto Sira / @BarretoSira

¿Si hemos luchado? Tenemos más de 18 años enfrentando a este modelo de hambre y corrupción. 

Hemos estados en las posiciones que Dios y el pueblo de Anzoátegui han indicado que estemos.

Hemos batallado, entre reveses y triunfos, y hemos permanecidos de pie y continuado en la pelea democrática. 

A veces nos ha tocado ganar y en otras ocasiones no. He representado a mi gente como alcalde y como diputado, y no estoy cansando. 

A pesar de los ataques, de los insultos, de las amenazas y del acoso, el régimen no han mellado mi compromiso de lucha, mi deber moral para con los anzoatiguenses. 

Este gobierno me inhabilitó por razones de persecuciónpolítica, ha intentado intimidarme, como a tantos otros compañeros de refriegas por la libertad, pero aquí estamos firmes como un roble. 

Cuando tenemos fe en Dios y en la gente nada nos puede pasar. Cuando luchamos por una causa justa nada nos podrá doblegar. 

Como dirigente político me ha tocado ser candidato y también he ha tocado ayudar a otros asumir la responsabilidad de ser abanderados de la Unidad, en ambos papeles he luchado sin distingo alguno por algo que es superior a cada uno de nosotros: la libertad de Venezuela. 

Quien les escribe, Antonio Barreto Sira, es un soldado más de la resistencia democrática; un hombre que ha dedicado años a la entrega de la lucha por un mañana mejor. 

Desde hace mucho tuve un sueño, hacer de Anzoátegui el principal estado de Venezuela. ¿La razón? Fácil: Nuestra tierra es bendita, posee las condiciones geográficas, estratégicas y climatológicas para ser el epicentro del desarrollo petrolero, turístico, agrario y pecuario de toda Venezuela. 

Esa meta, que existe viva en mis compromisos personales y en mis objetivos, se une al fin superior de hacer de Venezuela un país de libertades, donde la democracia regrese a ser nuestro modo de vida, donde la justicia sea libre y equitativa, donde los sueños de todos nuestros hijos se puedan hacer realidad dentro del país.  

Desde siempre Anzoátegui ha sido el centro inmediato de mis preocupaciones, y junto a esta tierra he sufrido al ver como los candidatos del hambre, como los enviados de este régimen la han sumido en el caos más infame. 

Nuestra entidad se encuentra desabastecida de todo. Nuestros hospitales en el suelo, nuestras vías de comunicaciones prácticamente inexistentes, las comunidades populares dominadas por el hampa y el desempleo galopando en medio de la escasez más atroz. 

Pero, estoy seguro que ahora sí vamos a conseguir liberar a nuestra entidad de las garras de la opresión y el desgobierno. 

Ahora sí obtendremos la forma de hacer de Anzoátegui un territorio libre. Ahora sí, con el voto de todos los anzoateguienses, echaremos de esta tierra a los representantes de Maduro. 

Porque al votar no solo le ganaremos a Aristóbulo Isturiz, sino que le ganaremos directamente a Nicolás Maduro. Al derrotar al candidato del hambre nos impondremos sobre todo lo que representa este régimen. 

Ahora sí… Vamos a votar y a liberarnos de las ataduras de la opresión.