Pago de bonos en base al dólar profundiza economía de doble moneda en Venezuela
El régimen ya no habla en sus planes económicos de bolívares, sino de dólares. En el país petrolero, donde ya el dólar es la mayor referencia de precios, el decreto de Maduro profundiza aún más el poder de la moneda extranjera, advierten economistas
Con información de VOA Noticias
MARACAIBO, VENEZUELA — Por primera vez en 24 años de chavismo en Venezuela, el gobierno de Nicolás Maduro realizará pagos en base al valor de una moneda extranjera, ya no del bolívar. El gobierno comenzará a pagar bonos de alimentación y a trabajadores del Estado, así como a jubilados y pensionados, en base al tipo de cambio del dólar estadounidense.
En el país petrolero, donde el dólar ya es el principal referente en los precios, la decisión del gobierno profundiza aún más el “reino bimoneda” y el poder de la moneda extranjera, advierten economistas.
Maduro anunció el 1 de mayo que el pago de bonos de alimentación y del denominado “bono de guerra” que reciben los empleados públicos se realizaría con base en el precio del dólar en el momento de depositarse. En el primer caso, será de 40 dólares y, en el segundo, de 30 dólares —Maduro corrigió su anuncio inicial de 20 dólares cuando firmó el decreto, un día después.
El año pasado el gobierno venezolano había “anclado” los pagos del gobierno al valor del Petro, la criptomoneda gubernamental. El salario mínimo por ejemplo equivalía a medio Petro. Un Petro cuesta 60 dólares, según el poder central, pero el salario mínimo mensual se mantuvo en 130 bolívares, a pesar de la depreciación del bolívar y el alza del dólar. Así, un sueldo promedio, en teoría de medio Petro, equivale hoy a 5,2 dólares.
Antes del anuncio del lunes, el dólar ya era la mayor referencia de precios en Venezuela. Los precios de bienes y productos se expresan en dólares y la gente prefiere refugiar sus ingresos en esa moneda para evitar que se erosione su poder de compra, según economistas.
Seis de cada 10 transacciones comerciales en Venezuela se realizaban con dólares en 2021, según la firma Ecoanalítica. Ese promedio se redujo a 45%, en parte por la aprobación de un impuesto de 3% a las operaciones que se paguen con divisas.
“[El gobierno] va a ir profundizando el ‘reino bimoneda’, pues el uso del bolívar da capacidad de maniobra para el gasto público y la política burocrática del Estado venezolano”, dijo el economista y profesor de la Universidad Central de Venezuela Luis Crespo a la Voz de América.
El gobierno venezolano demuestra con la indexación de bonos al precio del dólar que “no ha logrado ni imponer el Petro como unidad de cambio, ni recuperar el poder del bolívar”, dijo Crespo.
Luis Oliveros, economista y decano de Ciencias Económicas de la Universidad Metropolitana de Caracas, subraya que el anclaje salarial al Petro fue “una promesa incumplida” y cree que el gobierno envía otro mensaje a la economía con su reciente anuncio.
“El gobierno no nos habla de bolívares, nos habla de dólares. El mismo gobierno nos está mandando un mensaje: ‘yo no puedo con la devaluación (del bolívar), ni puedo con la inflación’. No es nuevo, pero ahorita es una confesión de que de verdad no pueden”, dijo Oliveros.
El oficialismo “tiró la toalla” en cuanto a su animadversión con el dólar, señaló Oliveros.
[El gobierno] “debe permitir la dolarización financiera, debe quitarse esa careta y permitirla por el bien de la economía”, advirtió.
Sin Petros tras la corrupción
Maduro suele culpar públicamente al “dólar criminal”, el de los mercados paralelos, y al “bloqueo” de las sanciones económicas extranjeras por la mala fortuna de la economía de Venezuela. Hace dos años negó de plano que pensara implementar una dolarización.
“La moneda oficial no es ni va a ser nunca el dólar ni otra moneda extranjera. Lo que hay es mecanismos de una economía de guerra y de resistencia, que buscan en otras monedas y criptomonedas la forma de intercambiar productos”, dijo entonces a la prensa.
Crespo, por su parte, resalta cómo el gobierno ha descartado al Petro como esencia de la macroeconomía del país un mes y medio después de la revelación de una millonaria corrupción dentro del Estado venezolano, específicamente en la petrolera PDVSA y que involucra a la institución reguladora de las criptomonedas, la Superintendencia Nacional de Criptoactivos.
Joselit Ramírez, expresidente de esa superintendencia, está detenido, acusado de traición a la patria y de ayudar a desfalcar al Estado venezolano con operaciones irregulares en la industria petrolera y otras empresas propiedad del Estado.
Oliveros, por su lado, advierte que las sensaciones de la masa laboral y los mercados ante la indexación de bonos al dólar “son bastante negativas”. El gobierno, mientras, acota que no decretará pronto aumento de salarios.
Una economía bimonetaria
La indexación de bonificaciones al dólar es un “reconocimiento” de una economía dolarizada, opina el economista sénior de la firma Ecoanalítica, Giorgio Cunto.
La medida no implica, sin embargo, que el gobierno tenga intenciones de mover su estrategia económica hacia una “flexibilización” del uso de dólares en el país, apuntó Cunto.
El venezolano promedio “piensa en dólares” incluso cuando paga en bolívares y el ejecutivo nacional, al menos en términos retóricos, reconoce esa realidad, indicó.
“Es una forma de decir ‘dolarización’ sin utilizar el término ‘dolarización’ en una economía bimonetaria, con la popularización del dólar de manera desordenada, desigual y a veces caótica”, comentó Cunto, profesor de estadística de la Universidad Católica Andrés Bello.
El experto advierte que la indexación de bonos implica “el riesgo” de rezagos por las diferencias entre el tipo de cambio y la inflación en apenas meses. Si bien no se conoce la magnitud o impacto de esos bonos en cuanto a los recursos totales del Estado, Cunto cree que es insuficiente para generar “desequilibrios económicos” o inflación por su cuenta.