"Simón", la película venezolana que rinde homenaje a los caídos en las protestas
Una de las lecturas interesantes que tiene Simón es que el país entero le entregó las llaves del carro a una generación de estudiantes y les dijo: ‘vayan ustedes adelante’ y eso fue injusto porque eso era difícil"
Con información de VOA Noticias
El director Marcel Rasquin conversó con la VOA sobre la producción de la película "Simón", convertida en un “hito fundamental” en su carrera. Entre 2014 y 2017 se registraron Más de 250 muertos durante las protestas, de acuerdo con Provea y el Observatorio Venezolano de Conflictividad Social.
Venezuela es un país muy distinto al que solía ser en la época de las protestas antigubernamentales que dejaron muertos, heridos y exiliados.
Aquellos episodios parecían haber quedado en el olvido de sus ciudadanos, pero una película local ha traído este recuerdo reciente de la historia venezolana para rendir un homenaje a las víctimas, pero también como oportunidad de reconciliación colectiva, según afirma uno de sus creadores.
Bajo esa premisa nació “Simón”, una de las películas venezolanas más exitosas de este año, cuyo éxito no sólo se refleja en la taquilla nacional. También ha sido proyectada en varios festivales internacionales y ha obtenido premios.
La película del director venezolano Diego Vicentini, narra la historia de un joven estudiante interpretado por el actor Christian McGaffney, quien luego de protestar y sufrir la represión en Venezuela decide emigrar a Estados Unidos en busca de asilo político. Sin embargo, en el proceso recuerda todo lo vivido y se replantea si realmente valió la pena.
“Simón es un testigo de lo dura y desigual que fue aquella lucha (protestas 2014/2017), también de lo injusta que fue. Una de las lecturas interesantes que tiene Simón es que el país entero le entregó las llaves del carro a una generación de estudiantes y les dijo: ‘vayan ustedes adelante’ y eso fue injusto porque eso era difícil", dijo Mariel Rasquin, productor de la película, durante una entrevista con la Voz de América.
"El país los dejó solos. Ellos con ese ímpetu hermoso de la juventud, de salir y batallar se lanzaron en una misión casi suicida, muy peligrosa, donde se expusieron mucho. Cuando a la juventud lo que le corresponde es ir a la universidad, salir a bailar…”, agregó.
El trabajo detrás de “Simón”
La historia del joven estudiante no estuvo pensada inicialmente para ser una película, sino un cortometraje que se estrenó en 2019 y recibió tantas buenas críticas que su director se replanteó la idea de llevarla a la pantalla grande.
Así fue como Vicentini contactó a Rasquin, director de otras películas venezolanas como “Hermanos”, quien al conocer la historia decidió apoyarlo y fungir como el productor de la cinta.
“Un día Diego me llamó para contarme la idea, y cómo lo podía ayudar. Yo acepté porque me sentí identificado y recordé cuando yo también busqué apoyo para mi película Hermanos. Entonces le dije : ‘chamo yo no sé qué vamos a hacer, pero yo te voy a acompañar, vamos a producir la película, yo puedo ser tu productor’", recordó Rasquin.
El director venezolano asegura que uno de los retos más importantes de la película fue lograr una dualidad en cuanto al tipo de público al que estaba dirigida. Explica que aunque sabían que la historia calaría mucho más entre los venezolanos, también querían que los extranjeros pudieran entender de qué trataba para poder conectarse.
“No queríamos que solo fuera una película para nosotros, queríamos que también invitara y mostrara al mundo lo que hemos vivido y lo que se siente, el drama humano que hay en la vida de Simón. Por eso hay un personaje estadounidense. Así que fue un ejercicio dual de cómo le contamos la historia a alguien que no sabe nada de Venezuela y cómo se lo contamos a los venezolanos que lo entienden todo. Fue entonces mantener un balance. Nosotros queríamos que la chama venezolana que estaba en Minnesota fuera al cine con su novio gringo y ambos lo puedan entender”, explicó.
Rasquin también aclara que pese a que Simón toca un tema político, sensible para la sociedad venezolana, no es una película política, sino humana y que tampoco se trata de una invitación para volver a las calles.
“Es una película sobre el dolor, la culpa, el perdón, sabíamos que realmente ahí era donde estaba la potencia de nuestra historia. Contar desde el punto humano lo que vivió Simón y que eso resonara fuerte entre el pecho y la espalda de todo el que la viera”, agregó.
De acuerdo con el productor, la proyección de esta película y el sentir que deja en quien la ve, son muestras de que entre los venezolanos hay “una herida latente y muy reciente”, la cual parecía que ya se había olvidado.
“La película demuestra que si nos hacía falta, que no nos podíamos olvidar de lo que nos pasó, de lo que nos hicimos como país, del daño que nos hemos hecho, y que esos eventos traumáticos y dolorosos siguen siendo una herida viva”, dijo.
Simón se filmó en la ciudad de Miami en 2021, en medio de la pandemia del COVID-19 y contó con la participación de otros actores como Roberto Jaramillo, Franklin Virgüez, Pedro Pablo Porras, José Ramón Barreto, Prakriti Maduro y Arianne Girón. Además de un equipo técnico en su mayoría de Venezuela.
Proyección exitosa
Aunque el equipo creía que debido a la temática de la película, la misma podía ser censurada en los cines de Venezuela, no fue así. “Simón” se ha proyectado en todas las salas de cine del país desde el 7 de septiembre. Rasquin dice que desconoce a qué se deba la decisión, pero agradece que la permitan ver.
“Esta película ha gozado como de un manto de protección desde su inicio, ha tenido buena fortuna a pesar de que hemos pasado un montón de vicisitudes, ‘Simón’ está bendita, es como un milagro. Y eso yo se lo atribuyo a los caídos en las protestas que es a quienes va dedicada la película”.
Agrega que el equipo de la película está profundamente agradecido por el éxito que está teniendo en los cines, algo que confiesa, no esperaban y que ha sido un regalo para todos los que colaboraron, especialmente por la reacción de las personas al terminar de ver una historia que, según afirma el productor, es uno de los trabajos más importantes de su carrera.
“Estamos muy conmovidos y emocionados por la avalancha que ha significado mostrar a ‘Simón’. También nos hemos dado cuenta de lo valioso que hicimos, que la gente conecte de una forma tan profunda: es un regalo y un reconocimiento al trabajo de todos”.
“Nosotros no esperábamos esta catarsis colectiva, no solo el éxito en taquilla, que tampoco lo esperábamos pero no es lo más significativo, lo más significativo es que hemos estado en todas esas salas y la reacción de la gente es felicitando, aplaudiendo, agradeciendo. Eso es lo que nosotros nos llevamos. Es una sorpresa hermosa y al mismo tiempo triste, es agridulce”, finaliza el productor, no sin antes enviar un mensaje a los jóvenes venezolanos que se sintieron identificados con la historia.
“Todos somos Simón o hemos tenido a un Simón cerca, lo que yo les diría es que ha sido muy duro y que es necesario ese abrazo, esa reconciliación y ese repensar nuestro propósito, proteger nuestra vida y nunca claudicar. Hay muchas formas de luchar, de involucrarse y no deberían incluir entregar la vida”, concluyó.
Entre 2014 y 2017 se registraron Más de 250 muertos durante las protestas, de acuerdo con Provea y el Observatorio Venezolano de Conflictividad Social.