Abogado Santoyo pide investigar casos de prostitución infantil en Guanta y Sotillo
La situación se repite en el Casco Central y el Paseo de la Cruz y El Mar en Puerto La Cruz, zonas que carecen de controles por parte de los cuerpos de seguridad
Nota de prensa
Barcelona, 17/09/2021.- El abogado defensor de los Derechos Humanos en Anzoátegui, José Santoyo, pide investigar los casos de prostitución, explotación laboral y trato cruel que se han venido registrando en contra de niños, niñas y adolescentes en los municipios Guanta y Sotillo.
“Hemos recibido denuncias de que en las colas de chatarreros que abundan en el Puerto de Guanta, donde gandoleros amanecen esperando sus turnos, se puede observar gran cantidad de niñas y adolescentes que abordan y descienden de camiones. También se han visto niños y niñas dedicados a la venta informal e ingesta de alcohol en la zona a cualquier hora del día”, detalló.
La información fue corroborada por el dirigente opositor del municipio Guanta, Isrrael Caraballo, quien agregó que los actos han sido presenciados por habitantes de las residencias Las Malvinas, Puerto Mar y Parque Guaraguao, cuyas voces no han sido escuchadas pese a las constantes denuncias efectuadas.
La situación se repite en el Casco Central y el Paseo de la Cruz y El Mar en Puerto La Cruz, zonas que carecen de controles por parte de los cuerpos de seguridad.
“Solicito al Ministerio Público, Consejo de Protección del Niño, Niñas y Adolescentes, y demás instituciones que son corresponsables, que se inicie la investigación por esos tipos penales, adicionalmente por la vulneración de sus derechos, consagrados en la Constitución de la República y la Ley Orgánica para la Protección de Niños, Niñas y Adolescentes”.
El jurista aseguró que es necesario realizar una investigación de oficio a las denuncias realizadas a través de las redes sociales y a los actos que asegura son evidentes, públicos y notorios en las localidades antes mencionadas, donde ha proliferado gran cantidad de niños, niñas y adolescentes en condiciones de calle.
“En la zona norte contábamos con cuatro casas de abrigo, cuyas instalaciones han sido cerradas paulatinamente. Solo una funciona en Pozuelos y está colapsada, además de que no cumple con los estándares requeridos ni con recursos para la oportuna alimentación y educación de los menores”, resaltó.
El defensor de los Derechos Humanos insta al Estado a tomar las medidas para el restablecimiento, goce y ejercicio pleno de los derechos de los niños, niñas y adolescentes, así como prevenir, sancionar y erradicar este tipo de delitos, tratos crueles e inhumanos.
