Anzoátegui cerró la semana con nueva jornada de protestas
Dos nuevas manifestaciones se escenificaron este viernes 2 de octubre en diversas localidades del estado. En la ciudad de Barcelona, trabajadores tomaron las puertas de la dirección regional de salud en rechazo de lo que ellos catalogaron como una “exclusión” de beneficios
José Alberto Camacho / @josecamacho13
Barcelona. Anzoátegui terminó la semana como la comenzó. En medio de protestas.
Dos nuevas manifestaciones se escenificaron este viernes 2 de octubre en diversas localidades del estado. En la ciudad de Barcelona, trabajadores tomaron las puertas de la dirección regional de salud en rechazo de lo que ellos catalogaron como una “exclusión” de beneficios emanados por parte del Ejecutivo de Nicolás Maduro.
Los empleados indicaron que por iniciativa de la directiva de Saludanz, los trabajadores que se encuentran en situación de reposo, prenatal, trimestral y permiso por pandemia, fueron excluidos de la asignación de un bono para la trabajadores del gremio otorgado por la administración de Nicolás Maduro.
Para el delegado de prevención del hospital Luis Razetti Edisson Hernández, la directiva del Instituto Anzoatiguense de la Salud, viola la ley del trabajo y no conforme con ello levantan actas administrativas a los trabajadores que se niegan a asistir a sus puestos por considerar que están en riesgo de contraer el COVID-19, según lo estipulado en el articulo 53 de la Lopcimat.
“A las enfermeras Laura Parra y Maritza Abreu les levantaron actas administrativas porque amparadas en el artículo 53 de la Lopcimat decidieron no trabajar al no tener equipos de protección, esto es un abuso, ahora sacan a los trabajadores de los beneficios sin razón alguna”, dijo Hernández.
En la localidad de Boca de Uchire, ciudadanos y maestros marcharon por segunda semana exigiendo mejoras en los servicios públicos y reivindicaciones laborales.
Ciudadanos indicaron que desde hace más de 4 meses no cuentan con el servicio de agua y los maestros sostuvieron que no pueden trabajar con los bajos salarios que perciben, además que en el poblado es imposible impartir clases vía online debido a la baja calidad de la señal de telefonía e internet.