Venezolana fue apuñalada, estrangulada y quemada junto a su hija en México
Las autoridades mexicanas informaron que se determinó que la casa fue incendiada en tres zonas, incluyendo el lugar donde ocurrió el crimen
Con información de El Nuevo Herald
A Graciela Cifuentes, venezolana, y su hija Sol “les robaron su vida y sus sueños” una noche de marzo cuando las apuñalaron varias veces, las estrangularon y quemaron en su residencia en México. A la joven, además, la violaron.
Al principio hubo silencio sobre el hecho que ocurrió en marzo pasado en la delegación Álvaro Obregón, de la Ciudad de México, hasta que Cleila Cifuentes, hermana de Graciela, y otros familiares, alzaron la voz para exigir una investigación y que se esclarezca el caso.
“La noche del 15 de marzo del 2018 la casa de mi querida hermana y mi amada sobrina fue asaltada por unos monstruos quienes les arrancaron la vida de una forma que va más allá de todas las atrocidades inimaginables”, dijo Cleila en una carta que envió a la organización Feminicidio Activismo.
En la misiva detalló que a su sobrina de 22 años “la violaron, la acuchillaron, la estrangularon y después quemaron la casa para no dejar rastros de sus malditas manos asesinas”.
Sol, nacida en Guadalajara, era estudiante de arquitectura en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Su madre, fotógrafa especializada en gastronomía y que impartía clases de fotografía arquitectónica en la UNAM, “también sufrió los mismos horrores de la manera más despiadada, además de mirar como acababan con su niña”.
Las autoridades mexicanas informaron que se determinó que la casa fue incendiada en tres zonas, incluyendo el lugar donde ocurrió el crimen.
La Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México dijo en un comunicado que el organismo especializado en feminicidios de la Fiscalía Central de Investigación para la Atención del Delito de Homicidio se está encargando del caso y mantiene abierta todas las líneas de la pesquisa para dar con él o los responsables.
Benjamín Vargas, ex pareja de Graciela, señaló que las autoridades informaron al principio a la familia que se trataba de un incendio, pero luego les notificaron que no “se trataba de un accidente, sino de un ataque. Las habían matado”.
Una de las líneas de investigación que se planteó desde el principio fue la del robo, porque un vehículo Toyota modelo 2009, computadoras Mac, y equipo fotográfico fueron sustraídos. La familia no cree en esa versión, de acuerdo con el portal mexicano Sin embargo.com.
La quinta
Graciela Cifuentes es la quinta venezolana asesinada en México desde el 2017.
Kenny Finol fue desfigurada, violada y asesinada en marzo pasado. Wendy Vaneska también apareció muerta el 17 de febrero; a Génesis Ulannys Gibson Jaimes la mataron en un hotel en noviembre pasado y su cuerpo tenía signos de tortura; y Andreína Elizabeth Escalona Leyzeaga, falleció en diciembre pasado tras recibir impactos de bala de unos hombres que la persiguieron cuando iba en un vehículo con un acompañante.