Hombre se encadenó para pedir que su hija reciba tratamiento para el paludismo
La directiva del Colegio de Médicos en Anzoátegui reprochó que la dirección regional de la Salud mande a tomar hierbas, como tratamiento para la malaria
Nohemí Rondón
Barcelona.- Desesperación, impotencia y unas cadenas fue lo que acompañó hoy al señor Román Marcano, quien se apostó y encadenó en la sede de la Defensoría del Pueblo en Barcelona, para exigir a las autoridades regionales de la salud le provean a su hija el tratamiento para el paludismo.
El hombre informó que acudió al Instituto Autónomo de la Salud (Saludanz) y a la sede de Salud Pública, para buscar primaquina y cloroquina (medicamento que se utiliza para el tratamiento del paludismo) pero solo recibió un récipe avalado por el director de los entes, Eduardo Martínez y Stalin Fuentes donde le indicaron preparar una infusión.
En las indicaciones le recomendaron a Marcano usar las plantas conocidas como cundeamor, Altamira, citronela, quinina, una gota de cloro o creolina, y darle una toma a su hija dos veces al día; una fría y otra caliente.
El Colegio de Médicos de la entidad catalogó este hecho de inhumano e irresponsable, debido a que estas hierbas naturales no contrarrestan la malaria. “Lo peor de la situación es que eso fue avalado por Martínez y Stalin”, reprochó la directiva.
Recordaron que en Anzoátegui hay una epidemia de paludismo con más desiete mil casos. Además resaltaron que en Barcelona ya hay Plasmodium vivax, uno de los parásitos causantes de la más frecuente y extensamente distribuida forma de malaria benigna. Lo que se traduce en que ya hay casos autóctonos de la enfermedad.