Alertan sobre consumo de pollo sin las debidas condiciones sanitarias
El doctor Humberto Omaño, miembro del Colegio de Médicos del estado Anzoátegui, recomienda a la población no adquirir pollo si no ha recibido la refrigeración necesaria
Niurka Franco
La crisis que atraviesa el país no solo se refleja en el hambre y la inflación desmedida, también en el desespero de la población que ante la escasez opta por comprar alimentos de dudosa procedencia y sin las debidas condiciones de higiene. Tal es el caso del pollo, cuyo precio oscila entre 7 y 9 mil bolívares, pero en el mercado informal algunos lo ofrecen hasta 50% menos, solo que quienes lo compran corren el riesgo de contraer salmonella.
De acuerdo con lo dicho por el doctor Humberto Omaño, miembro del Colegio de Médicos del estado Anzoátegui, hay gente que compra pollo económico después de hacer horas de largas colas, pero el producto va contaminado con salmonella debido a su exposición al calor.
Es necesario según el galeno, verificar a la hora de comprar estas aves, que se encuentren debidamente refrigerados.
A modo de ejemplo y sin ánimo de generar alarma en la población, refirió que recientemente se han presentado casos de muerte en el hospital Luis Rezetti por infecciones y éstas han pasado a ser causas de muerte, desplazando incluso el cáncer y otras enfermedades.
Advierte que entre enero y febrero han sido atendidos pacientes con shock séptico, lo cual no es otra cosa sino infecciones que anteriormente se percibían en riñones u otros órganos internos, pero ahora se aprecian en piel, en partes blandas o intestinales.
Observa que este problema deriva de la falta de prevención y consulta prenatal, pues en la mayoría de los casos el problema lo presentan madres jóvenes, al punto que en lo que va de año se han presentado 7 muertes por shock séptico y éstos están relacionados con la mala alimentación.
Destaca que en el caso de una joven de 15 años fallecida, al practicarle la autopsia, esta arrojó salmonelosis.
Hizo un llamado a las autoridades y a la propia población para que se tome en cuenta la prevención a la hora de adquirir productos alimenticios o proteína animal para que verifiquen si se ha respetado la cadena de frío.