El secretario ejecutivo de la Mesa der la Unidad Democrática (MUD en Anzoátegui, Antonio Ricóveri, afirma que la movilización de venezolanos hacia Colombia para comprar comida deja al descubierto la crisis humanitaria que el Gobierno se niega a reconocer

Niurka Franco

Al Gobierno venezolano se le acabó el pan y ahora solo le queda el circo, del cual forman parte todos sus funcionarios negados a admitir la crisis humanitaria que es evidente y que el fin de semana fue percibida más allá de nuestra fronteras.

Así se desprende de lo dicho por Antonio Ricóveri, secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) en Anzoátegui, quien asegura que la realidad del país sólo ratifica el fracaso del modelo de gestión. A su juicio, desde el oficialismo no puede esperarse un acto de enmienda, por lo que la lucha debe continuar por una salida constitucional en el país y ésta es el revocatorio..

Ricóveri afirma que frente al colapso de la economía y el deterioro de la calidad de vida de la población lo que queda es activarse y mantenerse movilizados en la calle.

“Las soluciones no nos llegarán del cielo y los casi 8 millones de venezolanos que salimos a la calle el 6 de diciembre para impulsar un cambio desde la Asamblea Nacional, tenemos que continuar haciendo presión desde la calle, para que ese cambio se concrete. Al Gobierno solo le queda seguir intimidando, metiendo miedo, mientras nosotros continuaremos mos movilizados, todo en el marco constitucional".

Esperando a dirigentes nacionales de la Unidad

El dirigente de la MUD Anzoátegui anunció que ya cuentan con una extensa lista de voluntarios para la próxima etapa del referendo revocatorio. A su juicio no existe excusa para que las autoridades del Consejo Nacional Electoral no se pronuncien en torno a los siguientes requerimientos para que se produzca la consulta popular. “No hay excusa para impedir el revocatorio este año, a menos que el Gobierno decida dar un palo a la lámpara”.

Adelantó que esta semana se espera la presencia de dirigentes nacionales de la coalición a los fines de determinar la agenda, de cara a la segunda fase del proceso para avanzar hacia el revocatorio, como es la captación del 20% de las rúbricas.