Asamblea Nacional derogada; por: Luis Edgardo Mata / @luisedgardomata
Sí, los constituyentitas derogaron la vigencia y viabilidad de la Asamblea Nacional.
El régimen a través de la figura de la Asamblea Nacional Constituyente le da un golpe de estado a la AN arrebatándole la facultad para legislar.
El falsamente calificado poder constituyente actúa y se quita del medio a un Parlamento nacional elegido por más de 14 millones de venezolanos.
Pero, ¿a alguien le extraña esta acción? Para nada es sorpresiva, es parte de un guion que ya todos los venezolanos intuíamos.
La Asamblea Nacional fue asaltada por un régimen que no respeta las leyes ni la constitucionalidad del país; estamos ante un sistema de facto en el uso del poder.
Ahora bien, los diputados nacionales debe defender su institucionalidad, aplaudo la iniciativa de Julio Borges de llamar a una sesión urgente para discutir la última decisión de un órgano espurio.
Y además, como debe ser, invitó a miles de venezolanos a acompañarlos en la sede del Poder Legislativo nacional.
La Asamblea Nacional ha sido bombardeada por el Tribunal Supremo de Justicia, y aún en el discurso del gobierno se sigue hablando del fulano desacato; además, es víctima de la acción persistente e ilegal de la Constituyente.
Lo que en verdad quiere el régimen, con esta última medida, es encrespar los ánimos entre las filas de la oposición e incentivar el sentimiento abstencionista.
¿Para qué votar si igual nos quita lo que ganamos? Justamente esta es la pregunta que desean sembrar en el corazón y en la mente de la inmensa mayoría de los venezolanos para imponer en esta medida una elección sin oposición.
El régimen juega, y lo hace con rudeza y milimétricamente. Desde Miraflores no zurcen sin dedal.
Con la prácticamente inhabilitación de hecho de la Asamblea Nacional tiene dos objetivos: Aumentar la presión política en contra de la disidencia democrática, y desanimar a los electores de la democracia y de la libertad.
Mi invitación a todos aquellos que lean estas líneas es que se animen más, mientras más ataques y atropellos, nosotros debemos permanecer firmes y avanzar.
Si nos golpean y avanzamos, a la final son ellos los que se llenarán de temor; serán ellos los que corran a esconderse porque serán arrasados democráticamente por una mayoría que saldrá a votar para las regionales.
Aquí en Anzoátegui, y lo digo con propiedad, no podemos calarnos nuevamente a Aristóbulo Istúriz nuevamente sentado desgobernando a nuestra amada tierra.
Y les aseguro que el candidato del hambre perderá, porque hasta los mismos dirigentes del oficialismo le cobrarán el hecho de su mal gobierno y el haber abandonado la gobernación.