El presidente de Urepanz, José Hurtado, expresó que los empleados serán sometidos a un proceso de revisión

Susej Azócar

Más  de 300 trabajadores de los 1.600 que fueron despedidos de manera indirecta de la Gobernación del estado Anzoátegui, manifestaron dentro de la sede para exigir que sean reintegrados a sus puestos de trabajo

La información fue suministrada por Claudio Chirinos, secretario del Sindicato de los Trabajadores de la Salud (Sintrasalud), quien detalló que seguirán con las acciones de protesta hasta que se les respete el derecho al trabajo.

“Nosotros queremos que nos den la cara y se corrija esta situación, ya que son padres y madres de familias que se están viendo afectados y a los que se les quito el pan de cada día”, expresó el dirigente.

Señaló que ya los afectados acudieron a la inspectoría de Trabajo a solicitar el reenganche.

“También contamos con el apoyo del Consejo Legislativo del estado Anzoátegui (Cleanz) y de no obtener resultados favorables continuaremos la protesta pero en la calle”, comentó.

Por su parte el presidente del Sindicato Unión Regional de Empleados Públicos de Anzoátegui (Urepanz), José Hurtado, expresó que estos trabajadores serán sometidos a revisión ya que en la listas habrían personas que estaban en nómina de contratados y no cumplían ninguna función.

“Ellos ni siquiera eran parte de la nómina fija de la gobernación, por eso revisaremos caso por caso a ver si cumplen con los requisitos y sean absorbidos por la gobernación”, dijo.

Además denunció que la mayoría de estas personas incluidas en la lista, eran familiares de algunos directivos de la antigua administración y que estaban recibiendo un pago sin ejercer funciones.

“Muchas de estas personas tienen fecha de ingreso del 16 de octubre, es decir, un día después de que se supiera que Aristóbulo Istúriz había perdido la gobernación. Todo fue a lo loco y ahora le quieren echar la culpa al nuevo gobernador. Si hay alguien a quien le deban reclamar es a Istúriz”, precisó.