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El desesperado giro de Mark Zuckerberg para salvar su imperio

El CEO de Meta está pensando seriamente en volcar todos los esfuerzos en la IA... Incluso quiere cambiar el nombre de su compañía

Con información de Yahoo Finance

Mark Zuckerberg está viviendo unos meses turbulentos. Meta, anteriormente conocida con Facebook, no para de despedir trabajadores. Su mayor apuesta, el metaverso, es un proyecto fallido que no seduce ni a su propia plantilla. La desesperación del otrora genio de los negocios e Internet le ha llevado a cambiar de estrategia de manera radical y apostar por la Inteligencia Artificial, hasta tal punto de valorar cambiar el nombre de su imperio y que a partir de ahora sea conocido como MetAI.

Hace sólo 18 meses, Mark Zuckerberg apostó el futuro de Facebook al metaverso, e incluso cambió el nombre de la empresa por Meta. Ahora, algunos analistas temen que se esté obsesionando demasiado con otra tecnología que no tiene nada que ver ni con las redes sociales ni con la realidad virtual.

Tal y como revela Reuters, Zuckerberg y otros altos ejecutivos dedican ahora la mayor parte de su tiempo a la inteligencia artificial, según declaró a principios de mes el director de tecnología de la empresa, Andrew Bosworth. Boz, como se le conoce, fue el principal socio de Zuck en la malograda incursión del Metaverso, y algunos analistas se inquietaron por sus nuevos comentarios.

Los analistas de Bernstein emitieron una advertencia pocos días después de que los hiciera y tras reunirse con inversores tecnológico:

"No pierdan de vista el nuevo amor de Zuckerberg por todo lo relacionado con la inteligencia artificial", bromeaban en un correo electrónico de investigación. "Parece que el año de la eficiencia está llegando a su fin (llegamos a abril) y ahora es posible un cambio de nombre a MetAI (nuestra mejor suposición)".

Los inversores y analistas acaban de recuperarse del derroche de la empresa en metaversos. Ahora quieren que Meta se mantenga conservadora en materia de costes, y los despidos masivos de Meta, casi una cuarta parte de la empresa, parecen estar dándoles lo que quieren.

Pero si Zuckerberg quiere seguir el ritmo de OpenAI, Microsoft y Google en IA, le va a salir caro. En octubre, el director financiero de Meta dijo que la IA impulsaría "sustancialmente todo" el crecimiento del gasto de capital de la empresa en 2023. Meta ha recortado un poco sus planes de inversión desde entonces, pero la empresa ha estado comprando muchos chips de Nvidia, necesarios para entrenar nuevos modelos generativos de IA. Estos componentes pueden costar unos 10.000 dólares cada uno.

El grupo de investigación MetaAI utilizó 2.048 chips Nvidia A100 durante 5 meses para entrenar un nuevo conjunto de modelos lingüísticos, según tuiteó el viernes Emad Mostaque, ejecutivo del sector de la IA. Desde el 25 de octubre, cuando Meta dijo que estaba invirtiendo más en IA, las acciones de Nvidia se han más que duplicado, mientras que las de Meta han subido cerca de un 54%.

Meta presenta sus resultados trimestrales el 26 de abril, y Wall Street seguirá de cerca los planes de gasto e inversión de la empresa. No cabe duda de que la IA puede ayudar a Meta en su negocio principal de publicidad y redes sociales, mientras que el metaverso ha supuesto una importante distracción.

El sueño del metaverso se desvanece

Una vez imaginado como el futuro de la interacción social, el metaverso prometía un universo digital compartido donde los usuarios pudieran conectarse, trabajar y jugar. Facebook, ahora Meta, dirigida por su CEO Mark Zuckerberg, había dedicado 11.000 millones de dólares a hacer realidad este sueño.

La visión de Zuckerberg se encontró con el escepticismo desde el principio. El metaverso iba a ser una mezcla de realidad aumentada y virtual que permitiría a los usuarios sumergirse en un paisaje digital. Con su vasto alcance, parecía la vía perfecta para que Meta expandiera su influencia y dominara un nuevo ámbito. Sin embargo, su torpe puesta en marcha y sus problemas técnicos no tardaron en suscitar dudas sobre su utilidad (¿quién lo usaría realmente?) y burlas directas hacia el avatar personal de ojos muertos de Zuckerberg.

Por desgracia, Meta se encontró con importantes obstáculos. En primer lugar, las preocupaciones por la privacidad de los usuarios plagaron el proyecto. El historial de violaciones de datos y escándalos de Meta minó la confianza pública en la capacidad de la empresa para salvaguardar la información de los usuarios en un mundo virtual. Además, las presiones reguladoras aumentaron a medida que los gobiernos de todo el mundo examinaban el potencial de Meta para ejercer aún más poder a través del metaverso. Por último, la feroz competencia de gigantes tecnológicos como Apple, Google y Microsoft puso en entredicho la supremacía de Meta, ya que cada empresa luchaba por hacerse con un trozo del pastel del metaverso.

El giro de Meta hacia la IA

Ante los obstáculos en la búsqueda del metaverso, Meta ha dirigido su mirada al prometedor campo de la inteligencia artificial. El motor de este cambio es el deseo de la empresa de mantener su relevancia y competitividad en un panorama tecnológico en rápida evolución.

La incursión de Meta en la IA se sirve de una serie de iniciativas destinadas a potenciar sus servicios básicos y ampliar su alcance. La empresa ve el potencial transformador de la IA en áreas como los asistentes inteligentes, la moderación de contenidos y las experiencias de usuario personalizadas. Aprovechando la IA, Meta busca innovar, perfeccionar sus ofertas y adaptarse a las necesidades siempre cambiantes de su base de usuarios.

El mundo de la IA está repleto de competidores, tanto gigantes tecnológicos consolidados como empresas emergentes. Por lo tanto, Meta no solo debe hacerse un hueco en este espacio abarrotado. También debe mantenerse por delante de rivales como Google, Amazon y Microsoft, que también están invirtiendo mucho en investigación y desarrollo de IA.

Para prosperar, Meta debe innovar y adaptarse, garantizando que sus soluciones de IA sigan siendo novedosas y relevantes en un mercado dinámico. ¿Será capaz Zuckerberg de cambiar el rumbo de su compañía con éxito? ¿O se volverá a equivocar?