“Algunas personas han luchado para poder votar. Está muy mal que la mayoría de los jóvenes no lo hagan”

Con información AP

PARÍS (AP) — La alianza del presidente francés Emmanuel Macron obtuvo la mayor cantidad de escaños en la ronda final de las elecciones el domingo pero perdió su mayoría parlamentaria, según proyecciones.

Las proyecciones, en base a resultados parciales, muestran que los candidatos de Macron obtendrían entre 200 y 250 escaños, mucho menos de los 289 necesarios para tener mayoría absoluta en la Asamblea Nacional.

De comprobarse, la situación le dificultará a Macron las maniobras políticas para lograr la aprobación de leyes.

Una nueva coalición — integrada por la izquierda radical, los socialistas y los verdes — será la principal fuerza de oposición con entre 150 y 200 escaños, según las proyecciones.

Indican también que el ultraderechista Marcha Nacional aumentó pronunciadamente su presencia parlamentaria, pasando de ocho escaños a más de 80.

Las votaciones se llevan a cabo en todo el país para elegir a los 577 miembros de la Asamblea Nacional, el recinto de mayor peso en el Parlamento francés.

El sólido desempeño de la coalición de izquierda, encabezada por Jean-Luc Melenchon, le haría todavía más difícil a Macron implementar la agenda por la cual fue reelegido en mayo, incluyendo las reducciones fiscales y el aumento a la edad de jubilación de 62 a 65 años.

Macron aún tendrá la capacidad de gobernar, pero sólo mediante la negociación con legisladores. Los centristas podrían intentar negociar caso por caso, con el objetivo de evitar que la oposición crezca a tales números para rechazar las propuestas.

El gobierno también podría usar ocasionalmente una medida dispuesta en la constitución para adoptar una ley sin someterla a votación.

Una situación similar se presentó en 1988 con el gobierno del socialista Francois Mitterrand, quien en ese entonces tuvo que buscar el apoyo de comunistas y centristas para aprobar leyes.

Estas elecciones parlamentarias quedaron nuevamente definidas por la apatía del electorado, una vez que más de la mitad del padrón se quedó en casa.

Audrey Paillet, de 19 años y que votó en Boussy-Saint-Antoine, en el sureste de país, quedó triste al ver a tan pocas personas en los centros de votación.

“Algunas personas han luchado para poder votar. Está muy mal que la mayoría de los jóvenes no lo hagan”, declaró.

Macron hizo un emotivo llamado a los votantes a principios de esta semana minutos antes de partir rumbo a una gira por Rumania y Ucrania, advirtiendo que una elección inconclusa o un parlamento indeciso podrían poner a la nación en peligro.