Es uno de tantos albergues que no cuenta con las mínimas condiciones  de salud, de alimentación, de distanciamiento social y mucho menos de un trato digno para los ciudadanos venezolanos

Nota de prensa 

Desde Vente Venezuela en el estado Apure denunciamos una vez más ante la comunidad internacional y organismos defensores de los Derechos Humanos la grave situación que se vive en los denominados "refugios" para venezolanos que llegan del exterior, dispuestos por el régimen para supuestamente controlar la pandemia por Covid-19. 

El caso que ahora vamos a citar es el reflejo de que Venezuela es un Estado fallido donde un régimen criminal se ha empeñado en humillar y desmoralizar al venezolano con sus acciones brutas contra nuestros hermanos que retornan a su país, producto del Coronavirus. 

En la aduana de El Amparo, existe uno de tantos albergues que no cuenta con las mínimas condiciones  de salud, de alimentación, de distanciamiento social y mucho menos de un trato digno para los ciudadanos venezolanos. Allí hay al menos 700 personas confinadas en tres carpas de campamento militar, en las cuales hay un aproximado de 200 niños, todos ellos expuestos a picaduras de mosquitos, erupciones en la piel y enfermedades estomacales, ya que ni agua potable tienen, sino un agua sucia que no está apta para el consumo humano y comida una vez al día.   

Este lunes 20 de julio, en una de estas carpas con 198 confinados, se detectaron 15 contagios, los cuales fueron aislados del resto y trasladados en un autobús. ¿Quién asegura que los demás que estaban en esa carpa no están también contagiados?

Esta denuncia, así como las otras hechas desde  nuestra organización sobre otros refugios, es una muestra de la violación sistemática de los derechos humanos por parte de un régimen que debe salir cuanto antes del poder. Para ello, proponemos una OPE (Operación Para la Estabilización de Venezuela), entendiendo que se trata de un conflicto que trasciende nuestras fronteras y necesitamos ayuda de nuestros aliados para enfrentarlo. 

Nuestros ciudadanos no aguantan más, en Venezuela no hay democracia desde hace muchos años y nuestro deber es denunciar y actuar responsabilidad, seriedad y sin tregua a las mafias, para que verdaderamente el país retome el hilo democrático  y constitucional y seamos una nación soberana, con una administración seria y que dé la respuesta que el país se merece ante esta pandemia.

No queremos más virus socialista, ese que acaba con todo a su paso, tampoco virus chino que acorrala a nuestra gente  en un confinamiento criminal, queremos libertad, queremos una salud digna para nuestros ciudadanos, queremos gente calificada al frente de las soluciones que necesita nuestro país, ¡Queremos nuestra República de vuelta!

San Fernando de Apure, 22 de julio de 2020.