El diputado a la Asamblea Nacional indicó que la dictadura de Maduro nos ha llevado a la peor crisis alimentaria de la historia

Redacción

El diputado a la Asamblea Nacional por el estado Zulia y dirigente regional de Voluntad Popular, Gilmar Márquez, alertó sobre el colapso de la producción agrícola y pecuaria en Venezuela por la falta de inversión e insumos para trabajar los campos del país. Asimismo, condenó las políticas fracasadas impuestas  por el régimen de Nicolás Maduro en torno a la producción venezolana. 

“No se trata de la producción de un rubro o de una región,  sino del país completo. Aquí se está produciendo solo el 20 % de la capacidad de las tierras venezolanas y los 18 estados con vocación agrícola están atravesando un problema extremadamente grave, ya que no existen herramientas para poder controlar las malezas, insumos para garantizar la producción de alimentos ni  medicinas para atender al ganado o las enfermedades típicas de la zona tropical”. 

A su juicio, el régimen de Maduro abandonó el campo venezolano, lo que ha originado la disminución de la calidad y la cantidad de producción de alimentos en el país. “La dictadura nos ha llevado a la peor crisis alimentaria de la historia. Alertamos los venezolanos sobre la necesidad de actuar de forma firme y exigir un cambio en las políticas aplicadas desde Miraflores. Exigiremos un nuevo ordenamiento jurídico y la intervención de las unidades de producción. Confiscar la producción, y que gobernadores y alcaldes se adueñen de la producción, no traerá soluciones para los venezolanos”.  

Además denunció que la crisis en el sector trasporte ha agravado la situación en los campos de producción y ha provocado la deserción de la mano de obra venezolana. Asimismo, rechazó la presencia de bandas criminales que se dedican a secuestrar y asesinar a los campesinos. 

“Lo poco que se produce en Venezuela lo hacen nuestros productores por el amor y el compromiso con el país. La mano de obra se niega a rendirse y por eso se sigue produciendo a pesar del abandono por parte  del régimen. Cuando un gobierno abandona la agricultura y  sus agricultores, condena a los ciudadanos al hambre”