La planta no está generando ni un tercio de lo que solía producir en un año, además la mayor parte de la mezcla es destinada a la Gmvv

Noemí Rondón

La empresa estatal Venezolana de Cemento conocida como  Pertigalete, ubicada en el municipio Guanta,  solo tiene operativo uno de los siete hornos para la producción del producto.

 El secretario de finanzas del sindicato de Venezolana de Cemento, Eleazar Vellorín, manifestó que debido al esfuerzo con el cual está trabajando el horno se ha aumentado el nivel de contaminación en la zona norte de Anzoátegui por la cantidad de polvillo que emana desde el lugar.

Precisó que esto también obedece a que, los filtros captadores de polvo no les han hecho mantenimiento desde hace años. “El año pasado los encargados de la planta nos prometieron que harían una parada en noviembre para realizar la limpieza pertinente, pero todo quedó en promesas”, agregó Vellorín.

La empresa solo está produciendo el 20% de su capacidad debido a la falta de inversión del Gobierno nacional. En 2017 la producción cerró en 867 mil toneladas de cemento cuando lo normal es de tres millones 200 mil toneladas de la mezcla.

El dirigente sindical reprochó el hecho de que, la mayoría de la producción sea destinada a la Gran Misión Vivienda Venezuela (Gmvv) y al programa Barrio Nuevo Barrio Tricolor. “Esto es prácticamente regalado, pues a pesar de que se vende a precio muy por debajo de costo son muy pocas las ocasiones cuando el Gobierno lo paga”, alegó.

Otras de las dificultades que padecen los trabajadores y por la cual salieron a protestar en los últimos dos meses de 2017 se debieron a la falta de material,  equipo de trabajo como la dotación de uniformes y bajos salarios.

Vellorín afirmó que quincenalmente devengan un sueldo de Bs 214 mil “el cual no alcanza para nada, es decir, una  embarazada va a recibir más dinero por parte del Gobierno nacional  sin tener que ir a trabajar, solo esperar la fecha para cobrar el bono”, cuestionó el trabajador.

Instó a todos los trabajadores de las industrias públicas unirse a la lucha por las reivindicaciones salariales y sociales.