Persiste la amenaza de ciertos “sectores oficialistas dispuestos a intentar un golpe legislativo al estilo del ‘Fujimorazo’ peruano, cerrar el Parlamento y buscar reprimir a la oposición cada vez más activa”

Redacción

La Asamblea Nacional de Venezuela, poder con mayoría opositora, iniciará el 5 de enero su nuevo período de sesiones bajo la conducción con otro presidente, quien deberá enfrentar los retos de un año que probablemente estará marcado por la agitación social y las renovadas amenazas del gobierno Nicolás Maduro.

En el 2016 el gobierno a través del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) logró despojarle gran parte de sus facultades constitucionales, y ha dado señales de que pretende terminar la tarea en el nuevo año, en medio del creciente descontento popular y los agudos problemas económicos que enfrenta el país.

Persiste la amenaza de ciertos “sectores oficialistas dispuestos a intentar un golpe legislativo al estilo del ‘Fujimorazo’ peruano, cerrar el Parlamento y buscar reprimir a la oposición cada vez más activa”, esta suposición la manifestó el secretario ejecutivo de la Mesa de la Unidad Democrática, Jesús Torrealba, al diario argentino El Clarín.

“No se debe creer que eso pueda ser un absurdo en la Venezuela actual”, agregó Torrealba.

La amenaza pondrá a prueba las cualidades de liderazgo del dirigente de Primero Justicia Julio Borges, quien el 5 de enero deberá reemplazar al actual presidente de la Asamblea Nacional, el también opositor Henry Ramos Allup.