Empanaderas de Lechería aseguran que las ventas repuntaron, pero aclaran que en comparación con el Carnaval  2014 han sido menores

Niurka Franco

Pese a las cifras oficiales sobre el número de temporadistas que escogieron a Anzoátegui como destino, algunos comerciantes informales que hacen vida en el municipio Urbaneja aseguran que esperaban mayor movimiento en las ventas.

En el caso de las empanadas, las creadoras de este majar tan buscado para el desayuno, existen opiniones encontradas y mientras algunas señalan que la zafra ha sido  favorable, otros precisan que no llenaron sus expectativas.

Es el caso de Carmen Serrano, quien observa que si se compara la actividad de los últimos tres días con la que tuvo  durante la semana anterior, hubo un incremento en las ventas de 50% aproximadamente, pero añade que respecto a la misma temporada el año anterior, ha sido floja.

Serrano precisa que está dedicada a la venta de empanadas desde hace 18 años y sabe reconocer las épocas. “Ha habido gente pero no compran mucho, parece que tienen el gasto controlado”.

 Sin embargo, dice haber tenido tres días de intensa actividad. “Hemos vendido bastante, de hecho tuvimos que incorporar una persona más, porque no nos dábamos abasto para atender la demanda de los clientes, pero no se compara con el carnaval de 2014”.

También Alexander Bravo, vendedor de frutos del mar en Playa Lido, manifestó que tiene muchos años en el oficio y que ha recuperado la inversión realizada, pero afirma “el año pasado a esta fecha a mí no me quedaba nada y ya ve, todavía tengo mercancía, espero poder recuperarme entre esta tarde y mañana martes”.

En el caso de Arcelia Cabrera, quien tiene su puesto de empanadas en la feria de Lechería, frente a la playa, el asueto no ha sido lo que esperaba. “Ya estamos recogiendo para irnos, cuando en otras épocas lo hacíamos a las tres de la tarde y apenas son las 12m en realidad esperábamos vender más, de hecho nos equipamos para tener un buen surtido, pero mire usted ni siquiera la playa luce llena”.

Los trabajadores de la microeconomía dicen tener cifradas sus esperanzas en las próximas vacaciones. “Para Semana Santa Creemos que todo será mejor” comentó Arcelia tras señalar entre risas, la gente decidió traerse su comida hecha para gastar menos”.