El dirigente de Bandera Roja dijo no haber sido sorprendido con la decisión del TSJ de arrebatarles la tarjeta electoral, a su juicio son acciones que muestran desespero

Niurka Franco

Para el dirigente político Gabriel Puerta Aponte, la decisión del TSJ respecto a la tarjeta electoral del partido Bandera Roja, no le tomó por sorpresa y por el contrario, refiere que se trata de una acción propia de la desesperación que anima a quienes gobiernan por saberse además de perdido, en el tercer lugar como opción.

“El despotismo chavista y sus mafias unidas, mediante la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, le acaba de arrebatar la tarjeta electoral a Bandera Roja y se la transfiere, cual moneda de cambio, a un pequeño personaje sin oficio conocido desde hace tiempo como agente del gobierno, y quien viene asumiendo la condición de impostor de un partido que resume buena parte de la historia del movimiento revolucionario venezolano y que es representado en las siglas BR”.

Refiere que con tal medida, el TSJ desautoriza al cuerpo rectoral del Consejo Nacional Electoral que había actuado con procedimientos ajustados a derecho,  como lo hicieron el mismo día de inscripción de las candidaturas de alcaldes y concejales de 2013, cuando según comenta, les  arrebataron la tarjeta a pocas horas de la inscripción,  entregándola al  mismo personaje sólo para efectos de inscripciones.

Señala que nuevamente ponen en práctica el mismo mecanismo. “Se nos  arrebata mediante esta miserable decisión la potestad de inscribir una fórmula de ética y unidad a través de nuestra tarjeta, demostrando el ventajismo electoral y el abuso de poder propio de toda dictadura”.

Destaca que tal decisión, supuestamente legal y similar a las inhabilitaciones o el despojo de las siglas del partido oficialista MEP, es una medida desesperada de un gobierno derrotado en todos los terrenos que se dirige a una estruendosa derrota electoral.

“La decisión tomada busca ir más allá. Persigue destruir a Bandera Roja como partido político y colocarlo al servicio de los planes del oficialismo mafioso que hoy gobierna”.

Añade que la tarjeta electoral de Bandera Roja sin su persona al frente de la Secretaría  General, sin su dirección política, Comité Central y sin su militancia, no es nada. Sin embargo, anunció que en las próximas horas anunciarán las medidas que buscan preservar su nuestra política electoral y la inscripción de candidatos tal y como lo habían.

“Es la hora del ciudadano y del cambio y por muy desesperados que se encuentren, no podrán revertir  la realidad, porque no se trata de discurso sino de realidades y el ciudadano ya sabe que llegó su tiempo”.