El Mercurio Web | Noticias, Información y Análisis

View Original

Entre el deber y la necesidad

Chela Salcedo madrugó este domingo para hacer la cola de rigor por detergente y pañales, luego iría a votar,  pero la prolongada fila en Farmatodo cambió sus planes 

Niurka Franco

Chela Salcedo  cuenta con 26 años, aunque su voluminosa humanidad, consecuencia de reiterados puerperios contraría lo que ratifica su documento de identidad, el mismo con el que juega el más pequeño de sus cinco hijos que lleva en brazos y que amamanta  cada cierto tiempo para evitar que llore.

“Pensaba ir a votar al salir de aquí, pero la cola está más larga que nunca. Si compro antes de las cuatro pasaré por la escuela donde me nuclearon, pero lo veo difícil porque hay demasiada gente”, comenta con desgano la joven mujer. 

“Ya estoy cansada de esto, todo el tiempo brincando de un lugar a otro para comprar un poquito de comida, para encontrar Ace, papel tualé, pañales y todo porque nada se consigue”.

Chela dice que estudió hasta noveno grado. “Tuve que dejar el liceo porque salí embarazada de mi niña mayor que ya tiene 11 años, pero quiero que mis hijos tengan futuro y eso es lo que no veo, por eso votaré por los diputados de oposición a ver si las cosas cambian, porque desde que tenía 10 años estoy oyendo las mentiras de este gobierno”.

Mientras conversa la cola apenas si se mueve. Con el pie rueda un bolso con ruedas con el que marca la cola. “Lo traigo para llevar las cosas y de paso acuesto ahí al niño si logro que se duerma”, dice mientras sonríe.

El drama de Chela no es distinto al que viven otras jóvenes madres venezolanas. “Mucho hablan de trabajadores y trabajadoras, de niños y niñas de liceos y liceas, pero la realidad es que las mujeres estábamos mejor cuando no habían tantas cosas en femenino, pero habían más oportunidades”.

La conversación con Chela tardó 35 minutos y la fila sólo avanzó unos 20 pasos pasos, continuábamos en la parte trasera del Farmatodo ubicado en el Centro Comercial el Ingenio en Barcelona.

 “Creo que ya no tendré tiempo de ir a votar, pero las parlamentarias no las pelo, de que voto voto  porque estoy muy cansada de tanto pasar trabajo”, afirmó.