Cacerolazo resonó en Caracas mientras Nicolás Maduro hablaba en cadena sobre tomar de empresas y continuar las represalias 

Caracas. Evely Orta

Mientras sonaban las cacerolas en varias zonas de la Gran Caracas, el presidente Nicolás Maduro aseguró, en cadena nacional de radio y televisión, que el alcalde metropolitano de Caracas, Antonio Ledezma, será procesado por la justicia "para que responda por los delitos cometidos en contra de la seguridad y la Constitución Nacional". 

El alcalde fue detenido este jueves en horas de la tarde por efectivos del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin), quienes lo sacaron de sus oficinas a golpes y empujones.

En un intento fallido de dividir a la oposición, el mandatario aseguró que posee la grabación de la persona que quería matar a Leopoldo López, y que está tentado a mostrarla para informar al país que un dirigente de la “ultraderecha” estaría involucrado, sin embargo no dio mayores detalles.

En la alocución, el mandatario aseveró que en el país "no hay intocables", en referencia a los involucrados en un supuesto plan desestabilizador. En los próximos días presentará nuevos videos que evidenciarían la responsabilidad de líderes opositores en la preparación de hechos violentos.

Según Maduro, la ministra de Relaciones Exteriores, Delcy Rodríguez, se reunió con el cuerpo diplomático acreditado en el país y expuso detalles de la supuesta implicación de funcionarios de la embajada de los Estados Unidos en la preparación de un golpe de Estado y que, según él, se ejecutaría entre los días 11 al 13 de este mes.

Así mismo hizo referencia al contenido del documento suscrito por Ledezma, la exdiputada María Corina Machado y el coordinador nacional de Voluntad Popular, Leopoldo López. "Ese documento publicado en el diario El Nacional recoge el espíritu del Carmonazo". Precisó que los tres dirigentes "firmaron el comunicado y son reincidentes".

También amenazó a los empresarios y afirmó que los trabajadores tomarán aquellas empresas que se presten para "sabotear" al Gobierno nacional. "Preparaos  obreros de la patria", exclamó el mandatario. Minutos después, los asistentes al acto comenzaron a gritar: "expropiación, expropiación".

Advirtió a los dirigentes opositores: "Tengo una misión y la voy a cumplir: hacer patria, hacer revolución". Insistió en su llamado a los grupos económicos que hacen vida en el país. "Si usted-empresario- ve que no puede aguantar la presión de Estados Unidos, váyase, entréguele esa empresa a los trabajadores y al Gobierno revolucionario".

Por último, invitó a sus simpatizantes a participar en las movilizaciones convocadas para conmemorar el 27 y 28 de febrero de 1989, cuando se produjo el denominado "Caracazo".