El Gobierno vuelve a despertar indignación aseverando que las colas fueron un terremoto que ya pasó

Redacción.

El vicepresidente de Soberanía Alimentaria, Carlos Osorio, aseguró que han disminuido las colas para comprar alimentos y productos básicos en abastos y supermercados, comparando la situación con un terremoto: hubo un sacudón, la gente se puso nerviosa y ahora llega la calma. 

El peor momento de las colas, según Osorio, fue el primer fin de semana del año. En tres días acudieron a los mercados y abastos más de 18 millones de personas, afirmó, una afluencia normalmente registrada en un mes. 

Osorio, entrevistado en Televen, volvió a acusar a la oposición de agitar las colas e incitar al desorden público e informó que las investigaciones han revelado que distribuidores de alimentos “estaban orquestados para llamar a las personas a comprar de manera urgente”.

Fue el mismo ministro quien llegó a aseverar que las colas en el país se debían a que había comida en los anaqueles.