El Senado de Estados Unidos tuvo la iniciativa de sancionar a violadores de derechos humanos y no al país, como dijo el presidente en cadena

Caracas. Evely Orta

Como bravucón de pueblo, el presidente Nicolás Maduro advirtió este martes,  en cadena nacional, a su homólogo estadounidense Barack Obama que si Estados Unidos apoya las sanciones a funcionarios venezolanos "saldrán muy mal parados".

La amenaza velada obedece a la posición asumida también este martes por la administración de Obama, cuyo vocero dio su apoyo tácito a un proyecto de ley en discusión en el Congreso, que impondría sanciones contra funcionarios venezolanos acusados de violaciones de derechos humanos contra opositores.

"Creo que si se impone la locura de las sanciones, presidente Obama, saldrán muy mal parados porque quien toca la tecla de la moral y del amor patrio a los venezolanos está jugando con la historia", exclamó el mandatario en un acto oficial.

Obama debe firmar la iniciativa, que fue aprobada el lunes en el Senado, para que se convierta en ley.

"¡Quién es el Senado de Estados Unidos para sancionar a la patria de Bolívar!", expresó Maduro."Indignación y repudio es lo que siente nuestro pueblo frente a las amenazas de la Casa Blanca. Están desesperados porque los hemos derrotado en este 2014 y vamos a seguir derrotando a sus títeres, al neofascismo de la derecha".

Esta conducta de Maduro y los miembros del gobierno es la que asumen tradicionalmente los mandatarios de regímenes totalitarios cuando están entre la espada y la pared, exacerbar el supuesto nacionalismo.

Pero es válido destacar que las sanciones estarían dirigidas a funcionarios del gobierno venezolano y no a la nación, y así lo ha expresado de manera categórica el senador Marcos Rubio, uno de los propulsores de esta ley.

Maduro dijo que ha estado "pensando" en el futuro de las relaciones diplomáticas con Estados Unidos, país desde el cual, según dijo, se han "desplegado funcionarios" para atacar a oficiales de la fuerza armada venezolana.

El texto legislativo del Senado se dirige a funcionarios señalados de dirigir o asistir en "actos de violencia o abusos serios de derechos humanos", arrestos o causas judiciales contra manifestantes antigubernamentales en Venezuela.

Si se ejecuta, estas personas tendrán prohibida la entrada a Estados Unidos, y sus bienes serán bloqueados.

Del proyecto final del Senado fue eliminada una cláusula que destinaba 15 millones de dólares para ayudar a organizaciones antigubernamentales y medios independientes venezolanos.

La Cámara de Representantes, que aprobó un proyecto similar en mayo, espera que se adopte el texto en los próximos días, los legisladores corren contra el tiempo: el Congreso actual quema sus últimas horas esta semana antes que una nueva legislatura dé inicio en enero. "Es materia de días. Si no, muere la iniciativa completamente", reseño AFP.

Entre los sancionables están el excanciller Elías Jaua, el mayor general Hugo Carvajal, el exministro de Relaciones Interiores Justicia y Paz Miguel Rodríguez Torres, la fiscal general Luisa Ortega Díaz y los gobernadores Francisco Rangel Gómez, Alexis Ramírez, José Gregorio Vielma Mora y Henry Rangel Silva.

En la lista inicial hay 56 miembros del Gobierno de Maduro que podrían ser sancionados por EE.UU. luego de que el Senado aprobara por unanimidad el proyecto de ley impulsado por el senador Marco Rubio, que pretende castigar los funcionarios s que hayan incurrido en violaciones de derechos humanos durante las protestas en 2014.